¿Es un error amar de verdad?

¿Es un error amar de verdad?

He nacido en un mundo lleno de esplendor y muchas oportunidades, y he visto con mis ojos de lo que es capaz el ser humano. No he sido el estereotipo de persona que quizás muchos quisieran, pero si he sido una persona sobre todas las cosas.

Mi nombre es Enrique y viví en una cuidad pequeña y muy conservadora. Como toda comunidad, nos conocíamos todos y éramos buenos vecinos los unos con los otros. Lo que mas me gustaba era que para las fiestas de año nuevo o navidad, salíamos todos a saludarnos y compartir un rato de amistad y compañerismo entre vecinos. ¿Por qué me ves escribir en tiempo pasado? La respuesta es muy simple, porque todo eso quedo en el pasado.

Un día caminando en el centro vi a un chico de unos diecisiete años aproximadamente, estaba sentado en el borde de un cantero lleno de flores, la imagen me pareció bella, pero a la vez triste ya que el chico estaba llorando desconsoladamente y la gente pasaba indiferente a su estado emocional. No me resistí y me acerqué a preguntarle que le sucedía. Y respondió:

-Mi familia ya no me ama y me saco de la casa.

Pregunte inquieto:

¿Por qué, que hiciste?

En mis pensamientos imaginaba que había ofendido a su familia con algo muy grave ya que las consecuencias fueron graves. Pero él respondió:

-Solo amar a alguien nada más.

La verdad había quedado desconcertado por su simple y fuerte respuesta. Pensaba ¿Cómo una familia puede no amar y sacar de la casa a una persona por el hecho de amar otra? Siendo sincero no entendía y le pedí que me explicara y solo me abrazo y lloro con mucho dolor. Luego que charlamos un rato sobre donde vivía y como hacía para sustentarse entendí con claridad lo que sucedía. Me conto que había estudiado corte y confección y que de eso vivía, aparte me contó que tenia un novio llamado José. Su familia no estaba enterada de lo que hacia para trabajar y ganarse su dinero honestamente, pero porque la cuidad era pequeña se enteraron a los meses. Recuerdo un dicho que dice “pueblo chico, infierno grande” eso me hizo mucho ruido por unos días. Obviamente me hice su amigo e intentaba animarlo, pero la verdad se encontraba muy deprimido. Mi familia me criticaba porque era amigo de él y me exigía que no lo viera más. Pero algo dentro de mi decía “no lo hagas”.

Yo tengo veinticuatro años y estudio la carrera de abogacía y trabajo de manera independiente en un kiosco de mi propiedad.

Como mis familiares me hostigaban constantemente sobre el tema del chico homosexual, decidí irme a vivir solo. Carlos mi amigo, vivía entre primos y se mudaba de casa en casa porque no querían que estuviera cerca de ellos. Entonces se me ocurrió ofrecerle que alquiláramos juntos. Su decisión fue el aceptar mi propuesta, y vivimos juntos por un buen tiempo. Eso tuvo consecuencias en mi vida personal muy graves que la verdad no estaba preparado para afrontarlas.

Durante un tiempo todo estuvo bien. Pero luego nadie quería comprar en mi kiosco ya que él era mi amigo y a veces me suplantaba mientras yo iba a la facultad. Mis ventas cayeron drásticamente al igual que mi ánimo. Intentaba ser positivo y ver siempre lo bueno en todos, pero ya se hacía difícil. Un día, su novio José lo paso a buscar y salieron. A los veinte minutos vuelve y se encerró en su cuarto, le pregunte:

-¿está todo bien?

Respondió:

-José me dejo porque dijo que no quería vivir más así escondido y se consiguió una novia formal con la cual se casará pronto.

Sin saber que responder solo entre a su cuarto y lo abrace y le dije:

-no importa amigo, yo soy tu familia y no te dejare solo.

Pasada una semana de ese suceso una de mis compañeras de curso me invita a salir y muy emocionado acepte. Cuando le comenté a Carlos se puso muy contento, me dio indicaciones de que hacer y no hacer en la primera cita con una chica. Al saber que tenia mas contacto con las chicas imaginaba que me daría la formula secreta para conquistarla pues todos los gay conocen mucho sobre mujeres.

La cita fue muy linda y todo resulto muy bien, decidimos ponernos de novios y todo marchaba bien, obviamente no le comenté sobre Carlos ya que no quería que ella se llevara una mala impresión de mí. El pueblo entero sabia que mi amigo era homosexual, pero pocos sabían los detalles de su convivencia conmigo y que yo era su amigo.

Un día Soledad descubrió donde vivía y para mi sorpresa ella llego a la puerta y Carlos atendió. La expresión de mi novia fue de asco y rechazo total y por mas que intente explicarle al igual que Carlos que solo éramos amigos, ella no quiso saber mas nada de mí.

Para ser sincero yo estaba muy enamorado de ella, y cometí el peor error de mi vida en no decirle la verdad al conocerla. Cuando Soledad se fue empezó a divulgar por todos lados que Carlos y yo éramos novios y que vivíamos en la calle Alvear al mil quinientos. Mis supuestos vecinos y mis compañeros llegaban de noche y tiraban cosas a la casa y empecé a acumular ira. 

Y un día cualquiera me levante de muy mal humor, Carlos volvía de la calle y me dijo:

-Mi mamá acaba de morir y no me dejan entrar al velatorio

Yo le respondí de manera impetuosa y grosera:

-Bueno al menos uno menos en la lista, la verdad no se para que quieres ir a verla si ella te rechazo.

Y respondiendo él dijo:

-No eres mi amigo? Ven conmigo.

Yo le dije:

-Lo único que me trajo tu amistad fue desgracia y ser marginado como lo eres tú, me arrepiento de haberte visto en la calle ese día, ojalá tengas el mismo destino ya que con eso solucionarías todos los problemas que ocasionaste.

Al oír esas palabras, Carlos salió de la casa corriendo y fue tarde mi reacción para detenerlo y pedir disculpas por mi estupidez.

Esa noche no volvió al departamento, ni la siguiente. Y me entere por los noticieros que un chico se había ahorcado en el puente de mi cuidad y su cuerpo estaba en la morgue para ser reclamado. Lo que sucedió luego fue verlo en el cajón mientras todos simulaban llorar por alguien que rechazaron. Yo no podía emitir sonido solo lo miraba acostado allí con los ojos cerrados y con expresión de tristeza en su rostro.

¿Es justo criticar sin conocer a alguien? ¿es justo que un ser humano sea cual sea su condición sea rechazado por todos solo porque es diferente? Carlos amo con intensidad tanto a su familia como a su amigo y jamás mostro una cara de desagrado hacia mi persona.

Hoy cargo con la culpa de su muerte la cual es un recordatorio de mi estupidez. Te aconsejo que no critiques sin saber, y ama con intensidad como lo hizo mi único amigo Carlos.