EN LA SIMA DEL MUNDO
"En la sima del mundo" Por Cristhian Morales Garcia.
Mañana tengo reunión con los gerentes de los bancos, es importante que asista porque necesito su apoyo para este proyecto. No debo olvidarme de preparar todo para mi ausencia en el país.
Mientras pensaba eso, recibí un llamado de mi secretaria diciéndome que hubo un altercado con los empleados de mi empresa. Aunque debí decirlo antes, soy empresario y tengo un emporio de empresas dedicadas a la compra y venta de otras empresas más pequeñas. Básicamente mi trabajo consta de comprar acciones en compañías en bancarrota y a cambio me quedo con un gran porcentaje de dichas empresas.
Al llegar a mi lugar de trabajo, un grupo de camarógrafos y paparazzi se agolparon en mi limusina. Hoy soy la novedad del momento porque tengo tanto dinero que no se lo que tengo. Todos hablan de lo poderoso que soy en el mundo de los negocios y de lo mal que hago mi trabajo, pero si hiciera algo erróneo, no estaría en la sima del mundo.
Cuando por fin pude entrar al edificio, me dirigí a mi oficina y sin darme un momento, empezaron a llegar quejas y demanda que solucione todo. Y obvio empecé con mi tarea diaria.
Mi trabajo y mi sueño de crecer no dieron lugar para una familia, solo tengo un cachorro que no se ni su nombre. Los que dicen ser mis amigos solo se acercan para pedirme favores y nada más, pero el día de mi cumpleaños mi secretaria se encarga de organizar todo para un gran festejo. En realidad accedo a eso porque pienso que es un festejo de mis empleados y siempre en esa fecha logro hacer nuevos negocios.
Luego de un día atareado subo a la terraza a fumar un cigarro y pensar un poco. Veo muchas veces que los empleados lo hacen y siempre quiero estar con ellos para sociabilizar, pero al verme se alejan a sus puestos de trabajo y me piden disculpas sin razón alguna. Mientras me quedo solo con mi amigo el cigarrillo, pienso detenidamente y llego a la conclusión de que estoy como al principio de mi vida, pobre y solo. Hoy tengo la pobreza mas grande que existe creo yo, no tengo amigos ni familiares que me amen. Estoy solo en casa con mi mascota.
Es lindo soñar y ver hecho realidad tus sueños pero cuando pasas la barrera del vivir tu sueño a convertirte en parte de tu sueño ya no es grato.
Yo te aconsejo que vivas tu sueños pero no te conviertas en ellos porque estarás como yo, rodeado de gente que no te ama mas que a tu dinero.
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